La estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) busca reiniciar la producción de asfalto en su refinería Bajo Grande, con capacidad de 16.000 barriles por día (bpd), dijo el martes el gobernador del occidental estado Zulia, Omar Prieto.
La refinería ha estado fuera de servicio desde el 6 de noviembre de 2018, según un documento interno de PDVSA visto por Reuters.
Casi toda la capacidad de la red de refinación de Venezuela, de 1,3 millones de bpd, está paralizada por años de desinversión y falta de mantenimiento, lo que ha agudizado la escasez de combustible en la nación OPEP, golpeada por la crisis económica.
“Realizamos una importante mesa de trabajo con @PDVSA Occidente y su coordinación operacional para el reimpulso de la planta de asfalto de Bajo Grande”, escribió Prieto, aliado del presidente Nicolás Maduro, en su cuenta de Twitter.
El reinicio planeado se produce después de meses de trabajo para reanudar las unidades de producción de gasolina en las refinerías de PDVSA, como Cardón, de 310.000 bpd, y El Palito, con capacidad de 146.000 bpd, debido a que las sanciones de Estados Unidos, destinadas a presionar la salida de Maduro del cargo, han dificultado las importaciones de combustible.
Las sanciones también afectaron las exportaciones de crudo de Venezuela, y en consecuencia, un aumento de los inventarios que han llegado a su máxima capacidad. Tal almacenamiento obligó a PDVSA a recortar la producción a menos de 400.000 bpd, el nivel más bajo de Venezuela desde la década de 1940.
Fuente: Reuters