En un foro que organizó la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría para debatir la premisa: “Nutrición Infantil en Emergencia”, el recién designado especialista en salud y nutrición de la Unicef, Dagoberto Rivera, manifestó que aunque se encuentran preocupados por la infancia en el país, como lo expresaron el 12 de mayo ante la publicación de boletines epidemiológicos del Ministerio de Salud, no tienen planteado pronunciarse al respecto. “Para la Unicef no es prioridad pronunciarse. La prioridad es que hagamos cosas. El intervenir para evitar cualquier muerte, ya sea a nivel del sector salud, en educación o en protección de derechos de los niños”, dijo a El Nacional.
Rivera abordó durante media hora las bondades de la lactancia materna en momentos de emergencia. Recalcó que la Unicef tiene un compromiso con la infancia e instó a los países a proporcionar datos sobre la situación de la niñez para crear acciones. Informó que la Unicef tiene acceso a los sucedáneos de la leche materna para el tratamiento de la desnutrición y que en tiempos de emergencia la lactancia materna siempre es lo ideal para mantener nutridos a los niños. “Sin información apropiada o parcial no se pueden definir respuestas”, señaló a los pediatras y nutricionistas presentes, poco antes de retirarse del foro en el que los pediatras y nutricionistas mostraron sus hallazgos de desnutrición infantil y materna en los hospitales y sus trabajos de campo realizados en el país.
Justificó desconocer el contexto del aumento de la mortalidad infantil y materna porque tiene 15 días en Venezuela, pero dijo que ya se reunió con el Ministerio de Salud y espera cita con el Instituto Nacional de Nutrición. “Estamos dispuestos a trabajar, pero necesitamos información”, declaró a El Nacional.
Pediatras y nutricionistas coincidieron en que la ayuda humanitaria más rápida para proteger a los niños de la desnutrición es darles lactancia materna.
La experta en seguridad alimentaria, Susana Raffalli, precisó que el país está en umbral de crisis porque, según el monitoreo centinela que hace junto con Cáritas para medir talla y peso en niños menores de 5 años en 30 parroquias, se revela que 12% de la muestra presenta desnutrición aguda. “En unos meses estaremos en emergencia”, alertó. También la pediatra Livia Machado mostró casos de madres que tuvieron un hijo prematuro que nació con 2.580 gramos y a los 10 días, por no conseguir fórmula láctea para su bebé, ya pesaba 1.680 gramos.
El debate se centró en promover la lactancia materna, pero aún buscan soluciones para los casos de madres desnutridas y las que viven con VIH y no pueden amamantar para no transmitir el virus, dado que no hay fórmulas lácteas. Pese a que el INN asegura que 80% de las mujeres en el país da la lactancia materna, los especialistas difieren y hablaron de un rango de entre 40% y 45%.