La Superintendencia Nacional de Gestión Agroalimentaria (Sunagro), junto con el Ministerio Público y la Guardia Nacional tomaron las instalaciones de la planta de producción de harina de trigo de Molinos Venezolanos (Molvenca) y procedieron a una inspección con amenaza de sanciones contra los responsables de la empresa, por una supuesta inconsistencia en los inventarios de trigo panadero.
Molvenca es una de las mayores productoras locales de harina de trigo, con aproximadamente 10% de participación de mercado, según un estudio preparado por Asotrigo con datos correspondientes a 2013. La compañía es propiedad del Grupo Sindoni.
De acuerdo con la información suministrada por la Sunagro, hubo un faltante de 8.998 sacos de harina de trigo panadero entre los inventarios reportados -el reporte de inventarios es obligatorio- el 28 de junio y el 11 de julio.
«Para el día 28 de junio la empresa reportó que contaba con 2.112 toneladas métricas de trigo panadero como parte de inventario para la elaboración de la harina de trigo correspondiente a julio, mientras que el pasado 11 de julio el molino reportó, en horas de la mañana, que solo contaban con 560 toneladas de la materia prima y al medio día nos comunicaron que se había terminado, lo cual causó una alarma y el despliegue inmediato de los fiscales acompañados de una comisión de la GNB y el Ministerio Público”. declaró el director regional de la Sunagro en Yaracuy, José Silva.
Más adelante, el funcionario explicó «con las 2.112 toneladas métricas de materia prima se tenían que producir 33.500 sacos de harina de trigo panadero, sin embargo, con la verificación realizada se pudo constatar que se produjeron 24.700 sacos, lo que arrojó un déficit de 562 toneladas métricas de materia prima la cual equivale a 8.998 sacos del producto terminado».
A los responsables de la planta se les pueden imputar los presuntos delitos de contrabando de extracción y boicot económico. La Fiscalía inició investigaciones contra Félix Ighor Chirino Calero, Gerente de la Planta; Francisco Aníbal Granda González, Jefe de Producción; Yonny Humberto Torres Uzcátegui, Jefe de Seguridad Física y los trabajadores Ángel Ramón Duran Mendoza y Amer David Oropeza.
En el procedimiento, que fue presentado como la «desarticulación de una mafia harinera», la Sunagro estableció control sobre la producción y los inventarios de la empresa harinera.