ConocoPhillips, la tercera mayor petrolera de EEUU, ha comenzado a hacerse con los activos de la empresa venezolana PDVSA tras la decisión tomada en abril por la Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional sobre la nacionalización de sus activos en Venezuela, informa Reuters.
PDVSA está desviando sus buques petroleros fuera del Caribe para evitar su inmovilización por parte de ConocoPhillips, añade la agencia, que informa de que la empresa estadounidense reclama todas las reservas de PDVSA en los terminales petroleros de Bonaire y la isla de San Eustaquio. Precisamente estas dos islas son muy importantes para las exportaciones de la empresa venezolana y constituyen la principal fuente de ingresos del país latinoamericano.
La Corte de Arbitraje Internacional determinó que PDVSA debe 2.040 millones de dólares a ConocoPhillips por “la expropiación de las inversiones de ConocoPhillips en los proyectos de crudo pesado de Hamaca y Petrozuata en 2007 en Venezuela”.
Inicialmente, ConocoPhillips demandaba más de 20.000 millones de dólares.
Tras conocerse la decisión, Caracas emitió un comunicado en el que calificó la sentencia como “una dura lección para la transnacional ConocoPhillips, pues el monto es incluso menor al que ofreciera legítimamente la República Bolivariana de Venezuela hace más de 10 años, para saldar una acuerdo justo en los términos de la Ley Orgánica de Hidrocarburos”.