Pdvsa apela a un incierto plan de contingencia para tratar de sostener una producción mínima de crudo y cumplir los compromisos con los principales aliados del gobierno de Nicolás Maduro, lo que parece ser la prioridad de la petrolera estatal en un momento cuando las sanciones impuestas por Estados Unidos comienzan a pasar la factura completa.
De acuerdo con un análisis de la firma S&P Global Platts, la petrolera venezolana se prepara para dejar de producir crudos sintéticos o mejorados, para focalizar su actividad en un petróleo menos complejo, procedente de la mezcla de crudos extrapesados con livianos, de los cuales existe una muy baja disponibilidad en el país, y nafta, un derivado costoso y difícil de importar.
La variedad Merey 16 es más adecuada para la dieta de las refinerías de China e India, los destinos casi exclusivos que podrían tener las pequeñas exportaciones nacionales, una verdadera debacle histórica para un país que alguna vez fue el primer productor del mundo y actual poseedor de las reservas probadas más grandes del planeta.
Según la fuente citada, Pdvsa espera una contracción de su producción a un promedio de 988.000 barriles diarios en agosto, de una extracción oficialmente contabilizada de 1.200.000 barriles por día, a principios de junio. S&P Global Platts sostiene que la producción efectiva de Venezuela era de 760.000 barriles diarios en la misma fecha. Las fuentes secundarias de la OPEP contabilizaron una media de 734.000 b/d.
Indica la agencia, citando fuentes directas de Pdvsa, que las exportaciones caerán a 685.000 barriles diarios en agosto, de 776.000. Estas estimaciones anticipan el escenario que se esperaba para finales de año. La razón de esta contracción es que las sanciones impiden que la empresa importe nafta y crudos livianos para mezclar, y además, la extracción local de petróleos dulces apenas llegará a unos 260.000 barriles por día, en agosto.
En consecuencia, el futuro de Pdvsa no puede ser más incierto. Según las fuentes internas citadas por S&P Global Platts, para que Pdvsa pueda recuperar el millón de barriles diarios de producción promedio, necesita importar 3,3 millones de barriles de petróleo liviano de 44 grados API de alto costo al mes, lo cual es imposible por las sanciones estadounidenses.
Si Chevron, clave para la producción de 190.000 barriles de crudo por día, y las empresas estadounidenses de servicios deben salir de Venezuela, este 27 de julio, la situación para Pdvsa será aún más crítica, si cabe.
Más allá del reporte de Platts, están los problemas financieros y de recursos humanos que lastran a la industria. Según fuentes de la empresa, Pdvsa ya resiente severamente la escasez de personal especializado, porque ha perdido cerca de 47% de sus profesionales de rango alto y medio, debido a que los niveles de ingresos no resultan satisfactorios.
Por otra parte, aparte de que la producción exportable es apenas una fracción de entre 250.000 y 290.000 barriles/día, de una producción total ya menguada y mayoritariamente comprometida por el consumo interno y el endeudamiento, hay que tener en cuenta que Pdvsa ofrece un crudo poco competitivo, que se ha visto obligada a vender con importantes descuentos, lo que complica aún más la situación financiera de la empresa.