La libertad económica en Venezuela está entre rejas: el país vuelve a ubicarse por cuarta vez en el último puesto del reporte anual del Índice Mundial de Libertad Económica (EFW, por sus siglas en inglés), elaborado por el Fraser Institute de Canadá con la colaboración de Cedice. En esta ocasión se evaluaron las economías de 162 países y territorios.
Los resultados del estudio muestran que la libertad económica en Venezuela presenta una caída sostenida durante los últimos ocho años. El concepto se entiende como “la capacidad de los individuos para decidir cómo utilizar su tiempo y recursos para modelar su vida sin interferencia de otros”, de acuerdo con Rocio Guijarro, gerente general de Cedice.
La libertad de la economía se evalúa con cinco variables: tamaño del gobierno, sistema legal y derechos de propiedad, existencia de una moneda sana, libertad de comercio internacional y regulaciones crediticias, laborales y empresariales.
Luego de analizar la situación venezolana se concluyó que este año la puntuación obtenida fue de 2,88 de 10. Las notas alcanzadas fueron las siguientes:
– Tamaño de gobierno: 4,69/10,00
– Sistema legal (independencia del Poder Judicial) y derechos de propiedad: 2,00/10,00
– Moneda sana: 1,94/10,00
– Libertad de comercio internacional: 3,28/10,00
– Regulación crediticia, laboral y de actividad empresarial: 2,48/10,00
El Observatorio de Derechos de Propiedad de Cedice ha demostrado que en los gobiernos del fallecido presidente Hugo Chávez Frías y de Nicolás Maduro ha habido “una política de ataque sistemático” contra el derecho de propiedad, establecido en el Primer Plan Socialista de la Nación 2007-2013.
Con expropiaciones, confiscaciones, nacionalizaciones y fiscalizaciones, el gobierno ha provocado la caída de la producción interna y generó un proceso de escasez de bienes de todo tipo, que no se había visto nunca en la historia de Venezuela, según Ana Carrasquero, investigadora del Observatorio.
También se ha profundizado el desabastecimiento de los productos de primera necesidad por las medidas de la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos. Además, ha aumentado la inseguridad personal y jurídica con las detenciones de gerentes de supermercados.
Otro aspecto es que la moneda nacional –que pasó de ser bolívar fuerte a soberano a partir del 20 de agosto–, sigue perdiendo cada día su valor debido al proceso hiperinflacionario en el que Venezuela está sumergida desde octubre pasado, cuando alcanzó por primera vez en su historia la barrera de 50%.
Solo en un mes, de julio a agosto, la inflación subió 98,1 puntos porcentuales. En julio fue de 125% y en agosto de 223,1%, de acuerdo con el índice nacional de precios al consumidor, calculado por la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional. La tasa diaria del mes pasado fue de 4%, lo que supera las proyecciones de la inflación de 2018 para países como Chile, que es de 2,8%.
Los resultados del Índice Mundial de Libertad Económica señalan que en Latinoamérica el primer puesto lo ocupa Chile. El lugar con mayor libertad económica en todo el mundo fue para Hong Kong. Le siguen Singapur y Nueva Zelanda.