Con la orden ejecutiva firmada el lunes por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Petróleos de Venezuela presenta una limitación adicional a su ya complicada situación financiera. Solo podrá realizar en efectivo las transacciones por el crudo que compre o venda en ese país, dijo José Toro Hardy, ex director de Pdvsa.
Añadió que la orden ejecutiva EO20180521, Prohibición de ciertas transacciones adicionales con respecto a Venezuela, profundiza la decisión de agosto pasado en cuanto a evitar que el gobierno de Nicolás Maduro se sostenga con préstamos que utilizan como garantía a la estatal y su filial Citgo en Estados Unidos.
Explicó que la medida no afecta la exportación de Pdvsa de entre 300.000 y 400.000 barriles diarios de crudo a las refinerías de Citgo ni otros requerimientos de petróleo que adquiera en Estados Unidos. Sin embargo, las transacciones solo podrá efectuarlas en efectivo. “Se trata de un control en la forma de pago que a la vez blinda a Pdvsa de realizar operaciones en beneficio del gobierno”.
Esto complica, añadió, la difícil situación operacional y financiera de Pdvsa signada por su enorme deuda comercial y en bonos, además de la poca capacidad de maniobra para obtener más ingresos, ya que está imposibilitada de incrementar su producción petrolera, que está en picada.
La explotación de petróleo en 2017 cayó 649.000 barriles diarios, pero en lo que va de año el bombeo de crudo registra un desplome de 400.000 barriles, lo cual representa para la industria petrolera nacional un retroceso de 70 años y que lleva la producción a los niveles de 1949, refirió.
El reporte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, basado en fuentes secundarias, indica que la producción venezolana bajó a 1,4 millones de barriles al día en abril pasado.
Toro Hardy destacó que Citgo es una empresa importante para Pdvsa porque tiene una cartera relevante de cuentas por cobrar y activos representado en una red de refinación en Estados Unidos de 749.000 barriles diarios de capacidad. Esto le permite a la filial pagar los cargamentos de crudo a plazos de hasta 120 días.
Señaló que el gobierno de Maduro ha aprovechado la posición de Citgo para obtener dinero fresco, y recordó que hace dos años el gobierno entregó a la petrolera Rosneft de Rusia 49,9% de la filial de Pdvsa en garantía a cambio de un préstamo de 1,5 millardos de dólares.
La orden ejecutiva del lunes, agregó, impide la recompra de esas acciones por Citgo y Rosneft, tampoco puede venderlas, por lo que la petrolera rusa puede exigir compensaciones al gobierno con operaciones y el manejo de activos de Pdvsa (refinerías, campos y áreas de petróleo y gas) dentro de Venezuela.
Insistió en que la medida estadounidense “es terrible para Pdvsa” porque además de la caída de la producción venezolana, la empresa afronta los atrasos en el pago de la deuda en bonos y a sus proveedores y contratistas como Halliburton y Schlumberger.
A esto se suma el fallo a favor de Conoco Phillips, de Estados Unidos, en su demanda por 2 millardos de dólares, que ejecuta con la confiscación de cargamentos de crudo en El Caribe. A juicio de Toro, el caso de la petrolera estadounidense tendrá un efecto dominó sobre otros libelos contra Pdvsa en curso, introducidos por otras empresas en los tribunales internacionales