La Mesa de la Unidad Democrática no asistirá al segundo encuentro previsto para hoy en República Dominicana, en vista de que el gobierno no ha cumplido con los compromisos adquiridos para sentar las bases de un posible diálogo. “No hay condiciones para continuar el proceso exploratorio en República Dominicana”, aseguró Luis Florido, presidente de la Comisión de Política Exterior de la Asamblea Nacional.
El diputado aseguró que ya notificaron a los países, que han acompañado la fase exploratoria, que no asistirán y destacó que la decisión es avalada por todos los partidos de la MUD. Señaló que una de las razones para no acudir es que “no hay una agenda clara de cara al proceso”. “El gobierno no cumplió con los requisitos previos en materia de derechos humanos, cronograma electoral y la asistencia de seis países garantes”, añadió durante una rueda de prensa.
Florido, junto con el presidente del Parlamento, Julio Borges, y el diputado Winston Flores, cuestionó que el gobierno no designó a su tercer país garante, luego de elegir a Bolivia y Nicaragua, mientras que la MUD seleccionó como acompañantes a Chile, México y Paraguay. Sin embargo, no descartó que la oposición acuda a una tercera ronda de contactos, pero que la misma dependerá de que el gobierno cumpla con su palabra. “No nos vamos a prestar a un show del gobierno. Sabemos que nos estamos jugando el país. Para retomar este proceso exploratorio tiene que haber unas condiciones muy claras”, subrayó.
Reiteró que la oposición no reconoce a la asamblea nacional constituyente y explicó que la negociación no es el foco principal de la MUD, debido a que los dirigentes se encuentran recorriendo el país con ocasión de las elecciones regionales. Invitó a los venezolanos a votar el 15 de octubre: “Venezuela puede comenzar este proceso de cambio si ganamos las gobernaciones. Son un elemento para las negociaciones”.
Henrique Capriles, gobernador de Miranda, dijo que el proceso de diálogo no es para perder el tiempo sino para buscar soluciones a los problemas de Venezuela. “El gobierno es el que tiene que dar señales de que efectivamente no quiere que esto sea lo mismo del año pasado”, aseguró en un acto de reconocimiento a los trabajadores de Miranda.
El dirigente señaló que el gobierno era el interesado en realizar una negociación con acompañamiento internacional, pero que si no funcionó el país tendrá elecciones el 15 de octubre que servirán para buscar una solución. “Votar es otra forma de protestar y castigar al gobierno”, dijo.
Sin falta. El canciller dominicano Miguel Vargas Maldonado afirmó el lunes que esta semana se producirá en su país otro encuentro entre el gobierno y la oposición, aunque no informó cuándo ocurriría ese contacto. Aseguró que el hecho de que se estén ultimando detalles en relación con algunos temas impide determinar la fecha exacta de la reanudación de las conversaciones.
Horas después, ese mismo día, Nicolás Maduro dijo que para hoy había sido ratificada la fecha del próximo encuentro entre la delegación de su gobierno y de la oposición. “Allí estará la delegación de Venezuela, sin falta, disciplinada, puntualmente y dispuesta a seguir los diálogos”.
La visita oculta de Rodríguez Zapatero
El 20 de septiembre José Luis Rodríguez Zapatero estuvo en Caracas. Trató de conseguir que el gobierno y la oposición se reencontraran en República Dominicana hoy, como se acordó en Santo Domingo a principios del mes. No lo logró, a pesar de que la Embajada de España fue el sitio de reunión con la oposición y del interés de la Comunidad Europea en una salida política a la crisis en Venezuela. En Miraflores lo recibieron pero, al igual que el ex jefe del gobierno español, los funcionarios optaron por mantener un bajo perfil.
El 25 de septiembre, el G-4 (integrado por Un Nuevo Tiempo, Acción Democrática, Voluntad Popular y Primero Justicia) se reunió y, luego de un polémico debate, decidió no ir a Santo Domingo sino enviarle una carta al presidente Danilo Medina. En la misiva exponen que el incumplimiento del gobierno de unas condiciones mínimas les impedía ir.
Las trancas de la negociación son la constituyente presidencial, el costo que supondría para la MUD en las regionales y las amenazas de enjuiciar a Julio Borges por supuesto magnicidio.