Pocos bancos estaban listos para el inicio de operaciones de las mesas de cambio el 13 de mayo. Tenían el tiempo en contra, pero era una necesidad que no podía postergarse ante la paralización del Dicom -único mecanismo oficial- luego de las sanciones impuestas por EEUU al Banco Central de Venezuela el 17 de abril.
«Era urgente que empezaran a funcionar las mesas de cambio en los bancos», dijo a Banca y Negocios una fuente del sector que aseguró que «al no poder acudir al Dicom, después de las sanciones, empresas, exportadores y casas de cambio estaban ahorcadas porque no tenían un sistema oficial donde realizar sus operaciones».
Expuso el caso de una compañía que debía vender dólares para poder pagar la primera quincena de mayo a sus trabajadores y ante la cercanía de la fecha, si no se abrían las mesas de cambio, iba a tener problemas para honrar el compromiso, ya que endeudarse en bolívares es una opción casi imposible dadas las restricciones que tiene la banca para otorgar préstamos por los elevados coeficientes que deben cumplir por encaje legal.
Las sanciones de EEUU al BCV sentenciaron la muerte del Dicom, que continuó funcionando hasta el 10 de mayo solo para personas naturales.
En el segundo día de operaciones de las mesas de cambio, dos bancos (Bancamiga y BOD) se incorporaron a los cuatro (Banco de Venezuela, Bancaribe, Banco Exterior, Banco Nacional de Crédito) realizaron compra-venta de divisas el lunes 13.
De acuerdo con el BCV, hasta ahora hay 13 instituciones financieras registradas para participar en el nuevo mecanismo cambiario.
La tasa de cambio de referencia de las entidades bancarias publicada por el BCV fue de Bs 5.256,12, seis bolívares menos que el día previo.
De acuerdo con algunos consultados, se espera que se reduzca la brecha entre el tipo de cambio paralelo y el oficial, cuando empiece a consolidarse el mecanismo.