El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió el miércoles en la Asamblea General de Naciones Unidas que Estados Unidos detenga las medidas unilaterales contra la nación OPEP, mientras el líder opositor, Juan Guaidó, solicitó mantenerlas y tomar “acciones decisivas”.
El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, viene aplicando desde el año pasado sanciones a entidades clave de la nación sudamericana, como la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), en un intento por presionar la salida de Maduro.
Venezuela “se encuentra bajo un ataque constante. Nuestra patria amada es víctima de un ataque multiforme por parte del imperio estadounidense (…) en el campo político, en el campo económico, hemos sido, inclusive, amenazados con agresiones militares directas”, dijo el mandatario.
Poco después del discurso de Maduro, el líder opositor y también jefe del parlamento bajo control de la oposición, Guaidó, pidió a la comunidad internacional mantener la presión y contemplar “acciones decisivas” porque se ha “llegado casi al final de la escalada que trazan los pilares de la responsabilidad para proteger sobre mecanismos pacíficos y diplomáticos”.
“Hoy les pido a todos los representantes de Estados miembros (…) considerar una estrategia que contemple escenarios luego de agotada la vía diplomática. Ha llegado el momento de acciones oportunas y decisivas”, dijo Guaidó.
El opositor habló en una teleconferencia a la que asistieron, según indicó su oficina de prensa, al menos unos 30 países que reconocen al político como el legítimo dirigente del país.
Guaidó no aclaró qué clase de presión o acción estaba solicitando, aparte de las ya aplicadas sanciones económicas a entidades y funcionarios del gobierno de Maduro por parte de Washington y la Unión Europea.
Maduro sostiene que esas sanciones restan recursos al país para enfrentar la pandemia global del COVID-19 y que han generado una crisis en el país, pero Venezuela está sumergida en una hiperinflación y recesión desde hace más de cinco años, previo a las sanciones.
“Es necesario que los países defensores de la paz se activen y hagan entender al gobierno de Estados Unidos que, en medio de una pandemia mundial, nadie entiende ni se explica que haya un recrudecimiento de la persecución criminal, del bloqueo contra países nobles como Cuba, Nicaragua, Venezuela, Siria y otros países hermanos del mundo”, dijo Maduro.
Por eso “se debe exigir el cese de todas las medidas coercitivas unilaterales, de todas las pretendidas sanciones, y que dejen a nuestros pueblos ejercer su propio derecho”, agregó.
El mandatario destacó también que en Venezuela existen garantías de cara a las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre y ratificó su invitación a que la ONU envíe observadores al proceso.
Medio centenar de países occidentales han pedido al gobierno en Caracas brindar iguales oportunidades en los comicios a partidos opositores. Las directivas de algunos de ellos han sido destituidas por las autoridades judiciales y electorales, que son vistas como cercanas al gobierno.
Fuente: Reuters