Caracas y amplias regiones de Venezuela volvieron a quedar a oscuras al final de este lunes 22 de julio por un nuevo apagón masivo, vinculado según el gobierno del presidente Nicolás Maduro con un «ataque electromagnético».
La falla dejó sin electricidad a gran parte de Caracas desde las 4:40 pm locales (20H41 GMT), y afectó los servicios de transporte, el suministro de agua potable y las comunicaciones telefónicas. Medios locales y ciudadanos en redes sociales reportaron cortes en todos los estados del país.
Más de dos horas después, en un comunicado el gobierno culpó de la falla a «un ataque de carácter electromagnético que buscó afectar el sistema de generación hidroeléctrica de Guayana», donde está la central hidroeléctrica de Guri, fuente de 80% de la energía que consume el país.
El texto leído por el ministro de Comunicación e Información, Jorge Rodríguez, en la televisora estatal VTV, reconoció la magnitud del corte como «un evento nacional».
Horas más tarde, Maduro denunció en un tuit un «nuevo ataque criminal».
«Siento indignación. No se hicieron los correctivos necesarios y es más de lo mismo. Cuidado si este apagón no es peor que los anteriores», dijo Eurimar Güere, de 36 años, tras salir de su oficina en el este de Caracas.
Rodríguez dijo que el gobierno trabajaba para restituir el servicio eléctrico «en el menor lapso posible» y que se activaron mecanismos para garantizar servicios como suministro de agua y transporte y mantener las calles seguras.
Un manto negro cubrió la capital venezolana al anochecer, sus calles vacías y apenas alumbradas por los faroles de los pocos automóviles que pasaban, pero sobre la medianoche empezó a restablecerse el servicio eléctrico en algunas zonas.
El gobierno ordenó la suspensión de las actividades laborales y educativas para el martes 23, dijo Rodríguez en Twitter.
A principios de marzo, un gigantesco apagón paralizó a Caracas y el resto de los 23 estados de Venezuela durante una semana, derivando en graves fallas de los servicios de agua y telecomunicaciones, y obligando a suspender la jornada laboral y las clases.
La atención hospitalaria también se vio afectada por ese incidente y otro más que se registró días después. La oposición denunció entonces una veintena de muertes por problemas en la atención en centros médicos.
En abril se registró otro corte que dejó a oscuras a gran parte del territorio, prolongándose por unas horas.
– «Destruyeron el sistema eléctrico» –
Con el apagón de este lunes, los semáforos quedaron fuera de servicio en Caracas, lo que generó grandes embotellamientos; ríos de personas caminaban por las aceras ante el cierre de estaciones del neurálgico servicio de Metro.
«Intentaron esconder la tragedia con racionamientos en todo el país, pero el fracaso es evidente: destruyeron el sistema eléctrico y no tienen respuestas», reaccionó en Twitter el líder opositor Juan Guaidó, jefe del Parlamento reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países.
Guaidó renovó llamados a protestar en una sesión callejera que la mayoría legislativa de este martes 23 en la plaza «Alfredo Sadel» de Las Mercedes, en Caracas.
Los apagones son habituales en Venezuela, en especial en la zona occidental. El gobierno suele achacarlos a sabotajes, mientras que la oposición y especialistas lo responsabilizan por falta de inversión en infraestructura, impericia y corrupción en medio de una grave crisis económica.
El gobierno atribuyó el apagón de marzo a «ataques terroristas» contra la central hidroeléctrica de Guri, y culpó a la oposición y a Estados Unidos.
Este lunes, tras denuncias de Venezuela sobre una nueva incursión de un avión de inteligencia de Estados Unidos en espacio aéreo venezolano, el líder chavista Diosdado Cabello vinculó ese tipo de incidentes con los apagones de marzo.
De acuerdo con el gobierno socialista, 78 violaciones de aeronaves estadounidenses al espacio aéreo venezolano se han registrado en 2019.
– Comercios cerrados –
Comercios cerrados eran una escena común a finales de la tarde este lunes, pues la falta de electricidad impide usar datáfonos para cobro con tarjetas de débito y crédito. Las tarjetas son fundamentales en Venezuela, debido a la escasez de dinero en efectivo por la rápida pérdida de valor de los billetes frente a la devaluación de la moneda local, el bolívar, y la hiperinflación.
«Tengo hambre, quiero comer y no hay dónde pasar la tarjeta», dijo Hernán Montalvo, quejándose de no tener efectivo ni para comprar un perro caliente.
Pese a los señalamientos de sabotajes, Maduro destituyó a quien fuera ministro de Energía Eléctrica en marzo, Luis Motta Domínguez. Su sustituto, Igor Gavidia, duró poco y el mandatario nombró en junio a un nuevo encargado de esa cartera, Freddy Brito.
A finales de junio, Estados Unidos impuso sanciones a Motta y a otro allegado de Maduro acusados de lavado de dinero y sobornos.