El presidente Nicolás Maduro anunció el jueves una reestructuración de la deuda soberana y de Petróleos de Venezuela, luego de ordenar el pago de unos 1,12 millardos de dólares por el capital de un bono de la petrolera que vence en la jornada.
La decisión podría complicar más el ya difícil panorama crediticio del país, que para negociar con sus acreedores deberá afrontar los obstáculos que suponen las sanciones impuestas por Washington, las cuales prohíben a las compañías de Estados Unidos comprar nueva deuda del país suramericano o de Pdvsa, señaló Reuters en su portal
La empresa financiera JP Morgan maneja cuatro escenarios con base en el anuncio del primer mandatario venezolano. Expone que “si bien los titulares rotundos pueden ser que el presidente Maduro finalmente ha “declarado un incumplimiento” anticipado, las palabras específicas del anuncio dejan los próximos pasos inciertos”.
El mandatario nunca precisó que Venezuela o Pdvsa “cesarían los pagos”. De hecho, en el preámbulo de su principal anuncio declaró: “Nuestra intención es seguir pagando la deuda”. Según Maduro, los principales culpables de las dificultades que atraviesa el país son las sanciones de la Casa Blanca y el liderazgo de la oposición que, cabildeó por ellos.
Junto con el “riesgo país injustamente alto”, estos factores han cerrado la posibilidad de que Venezuela refinancie su deuda normalmente, aseguró el presidente.
“Aunque el uso simultáneo de Maduro de las palabras ‘refinanciamiento’ (insinuando “voluntario”) y ‘reestructuración’ (insinuando involuntariamente) deja cierta ambigüedad en cuanto a qué tan duro podría ser su enfoque con el mercado”, afirma JP Morgan.
Por ello, para la empresa los cuatro escenarios por manejar serían que Pdvsa: a) pagará, b) refinanciará, c) reestructurará, d) todo lo anterior.