El golpe de timón que dio el Gobierno hace tres meses con la estrategia para hacerle frente a la guerra económica y a las raíces estructurales de la crisis, se dirige a varios puntos neurálgicos, pero el más importante es elevar la producción petrolera, considera Jesús Faría, economista, constituyente y ex ministro para el Comercio Exterior e Inversión Extranjera.
“El incremento de la producción de petróleo en este momento es la tarea central, porque es la única forma de obtener divisas de manera independiente, sin depender de otros factores. Estamos sufriendo una política de sanciones ilegales, infames, criminales por parte del gobierno de Estados Unidos, que apuntan básicamente al financiamiento externo. La posibilidad de estructurar deuda, de captar recursos en el mercado internacional es muy severa por las sanciones, y por ello debemos buscar traer divisas por el petróleo”, sostuvo durante una entrevista concedida a la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
Explicó que las sanciones de Estados Unidos apuntan al ámbito más frágil de toda la coyuntura económica, para afectar las mayores necesidades de la economía venezolana, con el bloqueo financiero que impiden a los bancos corresponsales que usa Venezuela en el exterior validar transacciones para cancelar medicinas y alimentos e insumos esenciales, “por eso tenemos que potenciar la única vía de la disponemos en este momento para generar divisa. Al incrementar la capacidad de producción aumentan las exportaciones para una mayor flujo de divisas”
Para Jesús Faría, la ecuación para incrementar la producción es muy clara y debe asumirse sin complejos. El primer paso de la tarea es reformular la política petrolera y adaptarla a los nuevos tiempos,”sin que ello signifique sacrificar la soberanía petrolera, pues ante las exigencias debemos poner esa enorme riqueza al servicio de la economía del país”.
“Se deben buscar esquemas que permitan que se desarrolle la producción sin complejos, pero también sin entreguismo, y de la manera práctica delinear cómo hacemos para traer inversión extranjera y privada, porque en este momento el petróleo es el sector que está en capacidad de mover la economía como ningún otro”.
¿En este objetivo interviene China con los 28 convenios que firmó el presidente Nicolás Maduro recientemente con la nación asiática’.
Los 28 acuerdos con China tienen que ver con la meta de levantar las inversiones en agricultura, en diversos sectores. El resultado de esos convenios en el sector petróleo, es el más importante a mi juicio.
“Se trata de buscar alianzas porque recuperando la industria petrolera se puede impactar el resto de la economía. Ningún otro sector de la economía tiene estas características. Nosotros somos una economía petrolera y seguirá siendo así por mucho tiempo. Hay que revisar esto con especial atención, qué hemos hecho bien y qué hemos dejado de hacer”, puntualizó el economista.
Pozos maduros, la clave
Faría, quien también es vicepresidente de comisión de Economía del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), señaló que en materia petrolera se deben identificar los puntos álgidos de la industria y corregir todo lo que sea necesario. Para ello remarcó que una alternativa para aumentar la capacidad de producción con poca inversión y en la cual ya existe una capacidad instalada, es la reactivación de los pozos maduros.
“No hay posibilidad de reactivar la economía sino aumentamos la capacidad de producción y ahí tenemos que apretar. Tenemos que ver hacia los pozos maduros donde hay ya una inversión instalada, comparativamente con poca inversión si la comparamos con la Faja Petrolífera del Orinoco. Con poca inversión se puede lograr un impacto muy importante en la producción petrolera, inferior a lo que se lograría con esa inversión en la Faja. Se generaría petróleo liviano que se cotiza a un precio muy superior en los mercados internacionales”.
¿Cuándo veremos resultados en la economía real con la aplicación del Plan de Crecimiento y Recuperación Económica?
Se había hablado de los últimos tres meses del año para observar cambios notables en lograr la estabilización de los precios, en la producción. Para ello debemos afinar el tema cambiario, los excedentes de liquidez, el esquema fiscal y un punto álgido que atenta a la estabilidad como la especulación cambiaria que sigue haciendo daño.
Sin embargo, hay que destacar el avance en la capacidad de compra en la población, no es lo óptimo no es lo ideal; pero si lo comparamos con lo que teníamos hace mes y medio, hay un avance sin duda alguna.
“Hay que hacer un mayor esfuerzo para seguir mejorando nuestra capacidad real de compra, de los salarios, de los ingresos, aumentar la producción de alimentos, de bienes de consumo masivo, frenar la inflación apuntalada por la especulación y algunos desequilibrios macroeconómico, por ello debemos ir a equilibrios en materia macroeconómica para que la economía se estabilice y pueda crecer”, resumió Jesús Faría.
