Goldman Sachs está expandiendo su huella política en Florida a medida que sus lazos de inversión a Venezuela -y las conexiones con los negocios del resto de la región latinoamericana- atraen paulatinamente el escrutinio de los parlamentarios del estado americano.
La empresa contrató su primera firma de lobbying y registró loobyistas para que avocaran con la administración de Rick Scott, gobernador del estado Florida, y con el Senado.
La firma de lobbying ya se reunió con Scott para discutir los crecientes esfuerzos de prohibir en Florida negocios con Venezuela.
Goldman Sachs compró $2.8 millardos en bonos emanados por Petróleos de Venezuela (Pdvsa) en mayo, un movimiento que recibió varias críticas de parte de parlamentarios estatales y federales.
El 5 de julio la oficina de Scott anunció que el gobernador estaba planeando prohibir al estado de Florida hacer negocios que beneficien al gobierno venezolano. Esto llamó la atención de Goldman Sachs.