El Fondo Monetario Internacional (FMI) anunció este domingo la adopción de un nuevo marco regulatorio con la finalidad de evaluar de manera “más sistemática” la corrupción en sus 189 países integrantes del organismo, al señalar su efecto negativo sobre el crecimiento, las inversiones y los ingresos fiscales.
Las nuevas medidas aprobadas por el comité director del FMI el 6 de abril, faculta a los equipos de la institución “a evaluar regularmente” la naturaleza y la gravedad de la corrupción, señala un comunicado.
“Hemos adoptado un marco para una mayor participación en la gobernanza y la corrupción que busca un compromiso más sistemático, equitativo, efectivo y sincero con los países miembro” que entrará en vigor a partir del 1º de julio, indica.
La lucha contra la corrupción no debería limitarse a enviar a los culpables a prisión para que sea eficaz sino que “su viabilidad a largo plazo pasa por amplias reformas regulatorias e institucionales para mejorar la transparencia y la responsabilización”, señala el FMI.
El Fondo planea controlar también a las empresas privadas que se libran a prácticas corruptas, reseñó la AFP.
Los países miembro son exhortados “a permitir una evaluación de sus disposiciones jurídicas e institucionales” en el marco de las misiones del FMI.
La corrupción disminuye anualmente 2% de la riqueza mundial y afecta la distribución equitativa del crecimiento económico, había estimado el Fondo en un informe publicado en mayo de 2016.
Los sobornos pagados anualmente en el mundo totalizan entre 1,5 y 2 billones de dólares, casi el Producto Interno Bruto de Francia, señalaba el documento.