El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que la caída del Producto Interno Bruto (PIB) venezolano será de 15% para este año y que la inflación alcanzará a 14.000%.
Así lo indica el organismo multilateral en su informe sobre las Perspectivas de la Economía Mundial dado a conocer en rueda de prensa por el economista jefe del FMI, Maurice Obstfeld en Washington, Estados Unidos.
En detalle, el crecimiento en el índice de precios al consumidor en el país presentó el siguiente comportamiento, para el cierre de 2017 fue de 1.087,5%; en 2018 a 13.864,6 % y de 12.874,6 % para el año 2019.
El documento resalta que el rendimiento de la producción petrolera tendrá un impacto tanto en el PIB local como en los precios internacionales del hidrocarburo.
Señala que “el derrumbe de la producción y de las exportaciones de petróleo intensifica la crisis que ha llevado a la contracción del PIB desde el año 2014”.
Explica que la extensión acordada por la OPEP y las interrupciones imprevistas del suministro, en la Costa del Golfo de Estados Unidos y Venezuela “redujeron inesperadamente la oferta (de crudo). Aunque en 2017 la oferta de petróleo desde países que no son miembros de la OPEP fue levemente mayor que la prevista, el brusco descenso de la producción en Venezuela -tras un mayor deterioro de la situación macroeconómica y financiera del país- contrarrestó con creces el aumento de la producción fuera de la OPEP”.
El documento indica que los contratos de futuros de petróleo apuntan a un descenso de los precios alrededor de 53,6 dólares el barril en 2023. Sobre este punto, el FMI estima que para las operaciones de entrega inmediata, basados en los precios de los futuros, tendrán en promedio de $62,3 el barril en 2018. “La caída se debe a un aumento previsto de la oferta de Estados Unidos y el fin del acuerdo de la OPEP”.
No obstante, apunta el organismo multilateral, “los riesgos al alza (en los precios) incluyen más retrocesos de la producción venezolana e interrupciones no planificadas del suministro en otros países”.
América Latina
El informe también indica que el crecimiento de América Latina, será de 2%, por encima del 1,3% registrado en el año 2017.
“Hemos visto una recuperación generalizada en gasto e inversión en Brasil, especialmente si nos remontamos al 2016, cuando la economía estaba contraída. Hay un retorno al crecimiento positivo, y el bajo nivel de inflación ahí también ayudó a bajar las tasas de interés”, explicó Obstfeld, en la presentación del informe de perspectivas globales, reseño Efe.
Así, el organismo atribuye al “mayor consumo y crecimiento en inversión privada” el aumento de sus estimaciones para Brasil, que verá crecer su economía en un 2,3% en 2018 y en un 2,5% en 2019, datos revisados ambos al alza en cuatro décimas respecto a la anterior actualización de hace tres meses.
El crecimiento de México, que se mantiene en el 2,3% para este año, y la subida de los pronósticos para las economías de Chile (del 3% al 3,4%) y Ecuador (del 2,2% al 2,5%) han contribuido también a que el FMI incremente sus proyecciones para la región.
El fondo destacó que la economía de México se beneficiará este año de la revisión al alza del crecimiento de Estados Unidos, que ha visto su proyección aumentada en dos décimas hasta el 2,9% en 2018.