Especialistas tributarios estiman que más del 80% de los trabajadores venezolanos estarán exentos del pago de los impuestos con relación al período fiscal enero – diciembre de 2018, pese a que durante el año el Gobierno aumentó en siete oportunidades el salario mínimo.
José Antor, profesor de Post Grado en la Universidad Simón Bolívar (USB), considera que los niveles de inflación en el país afectan la recaudación tributaria por parte de las autoridades del Servicio Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat).
Según los cálculos del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional (AN), la hiperinflación en el país supera el 1.500.000%.
El Universal consultó los registros históricos sobre los incrementos al salario mínimo nacional decretados por el Gobierno durante 2018, que arrojan una remuneración integral total, incluido el bono de alimentación, de 7.102,68 bolívares soberanos, cifra muy inferior para la base de excepción establecida por el Seniat en un mil Unidades Tributarias (UT), actualmente en Bs.S 17, es decir, Bs.S 17.000,00.
Antor aclaró que los contribuyentes que hayan obtenido durante 2018 ingresos superiores a esa cantidad estarán obligados a pagar impuestos, pero estima que será un aproximado del 20% de los contribuyentes a nivel nacional, “por lo general personas muy ricas y grandes empresas en general”.
El especialista observó que en el proceso de cálculo para el pago del ISLR el contribuyente maneja dos escenarios, uno relacionado con el período de enero a junio con el bolívar fuertes y otro ciclo a partir del 20 de agosto con el bolívar soberano, e indicó que sobre este último cono monetario es el que se aplica en la declaración y pago de los tributos al Fisco.
Víctor Hugo Mejías, catedrático en Derecho Tributario de la Universidad Santa María (USM), observa que las dificultades económicas han afectado la operatividad de las industrias y el comercio en general por lo que en su opinión, el Gobierno también tendrá dificultades “para satisfacer sus propias necesidades y más aún cuando el Ejecutivo exoneró del pago de impuesto a la industria petrolera”.
Como alternativa, los expertos apuntan que el Gobierno decidió pechar el 2% semanal del IVA, para obtener recursos.