Especialistas en ámbitos políticos, económicos y sociales coinciden en que los resultados del plebiscito popular de este domingo 16 de julio serán decisivos para la sostenibilidad del gobierno venezolano, debido a que la participación masiva en el proceso demostraría que el pueblo repudia las decisiones del presidente Nicolás Maduro, en especial la asamblea nacional constituyente propuesta por él.
“Este podría ser el mayor acto de desobediencia civil que se ha registrado hasta el momento”, manifestó desde Londres Diego Moya-Ocampos, analista senior de la firma IHS Country Risk, al diario estadounidense El Nuevo Herald.
Moya-Ocampos indicó que la respuesta masiva de los venezolanos este 16 de julio formalizaría la rebelión popular que exige el restablecimiento del orden constitucional en el país.
Oswaldo Ramírez, presidente de la firma ORC Consultores, calificó el proceso como una muestra de la necesidad que tienen los ciudadanos de cambiar al mandatario nacional y posiblemente reorganizar el Estado. “Significa una orden muy clara del pueblo a la Asamblea Nacional, como organismo legítimo, para activar un proceso para constituir un nuevo gobierno”.
Por su parte, Nelson Chitty La Roche, escritor y ex diputado, dijo que la propuesta de la oposición fue una movida inteligente para frenar la asamblea nacional constituyente y evitar que Maduro se perpetúe en el poder. “El plebiscito coloca un alfil en el tablero que amenaza directamente al rey, al poner en riesgo las intenciones de brindarle una nueva fachada democrática al régimen en su nueva etapa”.
Chitty La Roche agregó que el destino de Venezuela podría ser revelado este domingo en la noche con los resultados del plebiscito, debido a que quedará evidenciado ante la comunidad internacional el verdadero sentir de los venezolanos. Recordó que el proceso fue planeado para actuar como unas votaciones oficiales, con observadores internacionales que garantizarán su transparencia.