El hecho de que el Ejecutivo no presente el domingo 15 de enero la memoria y cuenta ante el Poder Legislativo es una nueva violación de la Constitución porque esta facultad es expresa de la Asamblea Nacional y no la puede asumir el Tribunal Supremo de Justicia.
Sin embargo, fuentes de la Mesa de la Unidad Democrática señalaron que están claros en que Nicolás Maduro puede argumentar que rendirá cuentas ante el TSJ, dado que el Parlamento declaró el abandono del cargo y lo han señalado de ilegítimo y de presidente de facto.
En lo que coinciden estas fuentes y el abogado constitucionalista, Antonio Canova, ante esta circunstancia inédita que se presenta en el país es en que no se trata de una situación constitucional, legal o jurídica, sino que es un hecho político.
Canova puntualizó que lo que pasa en Venezuela es que hay un régimen ilegítimo y dictatorial que ha afectado gravemente la carta magna. Afirmó que la AN actuó correctamente al dictar el abandono del cargo de Maduro y que lo que procede es que el Consejo Nacional Electoral convoque a elecciones en 30 días como lo pauta el texto constitucional. “El único poder legítimo y más importante es el Parlamento porque fue elegido en votación popular, mientras que Maduro no es representante de los electores, sino un mandatario que debe cumplir con lo que paute la AN a través de las leyes”.
Dejó en claro que la rendición de cuentas del Ejecutivo debe ser ante la AN y presentar la documentación sobre, entre otras cosas, el manejo de los fondos públicos para que el Legislativo pueda cumplir con su papel contralor.
“Lo que pasa está fuera del derecho y lo que impera es la fuerza y la política. La fuerza de Maduro que controla todos los poderes y además, el gobierno ha violado sistemáticamente la Constitución”.
Los parlamentarios. El diputado Stalin González (UNT), jefe de la fracción parlamentaria de la MUD, indicó que el hecho de que Maduro asista al TSJ y no al Parlamento a presentar su balance de 2016 “constituye una muestra más de que está fuera de la Constitución”. El parlamentario afirmó que si el abandono del cargo se hiciera efectivo, correspondería al vicepresidente ejecutivocomparecer ante la AN.
“Maduro tiene un año gobernando bajo el estado de excepción. No rinde cuentas, no presenta el presupuesto. La Constitución es clara: el presidente debe rendir cuentas ante la AN, al igual que el vicepresidente en nombre de los ministros”, afirmó.
Luis Florido (VP) señaló que la presentación del informe de gestión del presidente ante el TSJ carece de validez. Coincidiendo con González, indicó que “si se estuviera en una democracia normal, correspondería al vicepresidente de la República presentar el informe ante el Parlamento. También habría que hacer una elección a los 30 días, pero esto dejó de ser una democracia”.
Florido aseguró que en el país se ha producido un golpe al Parlamento. “Hay un desconocimiento de las atribuciones de la AN. Aquí se gobierna sin ninguna legalidad, el único precedente sobre esta materia ocurrió en Perú con el cierre del Parlamento. El gobierno fracturó el pacto social, es decir, la Constitución”, señaló.
El desconocimiento a la AN por parte del oficialismo continúa, pese a que el lunes pasado el Parlamento cumplió con las exigencias del gobierno de desincorporar en una plenaria a los tres diputados de Amazonas y, además, notificarlo por escrito al TSJ. Ese mismo día el oficio con la decisión adoptada en el Legislativo llegó al alto tribunal de la República.