El gobierno del presidente Donald Trump emitió nuevas licencias que permiten a algunas compañías estadounidenses pagar impuestos en Venezuela pese al amplio régimen de medidas de Estados Unidos, informa una nota de Reuters.
Las exenciones dejan claro que los pagos hechos al gobierno por impuestos, aranceles de importación y otras transacciones “necesarias” se permitirían pese a la orden ejecutiva del 5 de agosto que prohíbe a las empresas estadounidenses tratar con el gobierno venezolano.
Washington ha incrementado las sanciones como una forma de presionar la salida de Maduro, acusado de corrupción y de violación de los derechos humanos. Estados Unidos y decenas de otros países reconocen como líder al opositor Juan Guaidó, que en enero se proclamó presidente interino.
Los críticos dicen que las sanciones han perjudicado a los venezolanos comunes y al sector privado del país petrolero.
En concreto, el Departamento del Tesoro emitió la Licencia General 34A, que es una modificación de una licencia anterior, que permite a empresas y a personas estadounidenses hacer operaciones con funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro que presten servicios en sectores de servicios educativos y de salud.
La orden permite hacer una serie de pagos operativos como salarios y otros compromisos remunerativos y previsionales, con restricciones.
La Licencia General N° 35 autoriza pagos de impuestos, fees, tramitar permisos, licencias y certificaciones a ciertas personas naturales y jurídicas estadounidenses con entidades del gobierno de Venezuela, con el fin de facilitar sus actividades diarias.
La licencia exige la presentación de reportes periódicos precisos a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro sobre estos pagos.