La sustracción de aproximadamente ocho toneladas de lingotes de oro garantía de las reservas internacionales depositadas en las bóvedas del Banco Central de Venezuela (BCV) en la última semana, sin la observancia del protocolo legal dispuesto para tales procedimientos, denunció el diputado Ángel Alvarado
“Han estado sacando oro en cuatro camionetas por las puertas 3 y 4 del banco, usando un acta con fecha del año pasado para despistar”.
Estima el parlamentario miembro de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, que “pretenden venderlo de contrabando fuera del país”
A juicio del legislador, el destino de lo que calificó como “exportación ilegal” del metal sería Emiratos Árabes o Turquía. Detalló Alvarado que el oro fue retirado duranre los tres días de las bóvedas del ente emisor, y que en ese período no había personal de custodia del banco en las instalaciones.
Según denunció se contó con apoyo de vehículos de gobierno para el traslado. A este respecto, reseñó la agencia informativa Reuters que tres fuentes del Gobierno confirmaron “el traslado de los lingotes de las reservas y la falta de los guardias regulares en esos días, en los que el jefe del ente emisor, Calixto Ortega, estaba de viaje”.
De acuerdo a la Ley Orgánica del Banco Central de Venezuela, este organismo cuenta entre sus competencias con la potestad de vender el oro, pero deben seguirse los pasos de un proceso que no es tan corto en el tiempo, comentó el experto petrolero José Toro Hardy sobre el procedimiento denunciado por Alvarado.
El valor de las ocho toneladas de oro que se señalan fueron trasladadas de las bóvedas del BCV con destino no conocido, de acuerdo al denunciante, monta en aproximadamente 350 millones de dólares, según observó el especialista.
El oro constituiría un aproximado del 80% de la composición de las reservas internacionales, mientras que el resto, alrededor de 20% estaría conformado por divisas.
Según datos oficiales al cierre de 2018 alrededor de 140 toneladas de oro quedaban en reservas, este volumen es el más bajo en 75 años. Se señala que las ventas de lingotes son casi la única alternativa que tiene el presidente Nicolás Maduro para obtener liquidez, esto ante la caída de los ingresos petroleros y “el cierre de casi todas las opciones de financiamiento internacional por las severas sanciones que le impuso Washington para presionar su salida del poder”.
Los balances del BCV alrededor de 20 toneladas de oro monetario dejaron de estar en manos del ente emisor en 2018, según los balances internos del BCV, refirió Reuters.
Se ha venido ventilando, que actualmente en las bóvedas del Banco de Inglaterra reposan otras 31 toneladas de oro local. De acuerdo a reportes publicados a mediados de enero de 2019, la posición en el metal que mantiene el Banco Central de Venezuela en esa institución británica se duplicó a un valor equivalente a 1.200 millones de dólares.
En octubre, Venezuela contaban con 14 toneladas en esa institución, reseñó Reuters “La nueva acumulación de lingotes se debe a la cancelación que Venezuela habría hecho a finales de año a Deutsche Bank para conseguir recuperar unas 17 toneladas de oro que había colocado en garantía de un préstamo. Desde el año pasado el gobierno de Maduro activó solicitudes para recuperar ese depósito, sin resultado por las sanciones impuestas.