El presidente de la Cámara Petrolera de Venezuela (CPV), Reinaldo Quintero, aseguró que las mini-refinerías servirían como una solución «complementaria» a la situación que se vive en el país con el combustible.
Quintero afirmó que no buscan competir con el sector público, sino complementar su labor para solventar la problemática actual.
De acuerdo con el diario Petroguía, el plan de las mini-refinerías surgió como un proyecto alternativo de la CPV Capítulo Zulia, y en febrero pasado fue recogido por la directiva de Fedecámaras como una de las medidas para solventar la escasez de combustible, presentado ante la Asamblea Nacional oficialista.
El especialista comentó en entrevista para Unión Radio que «puede ser que para determinadas áreas y condiciones pueda funcionar como una alternativa».
Asimismo, estima que estas opciones en zonas aledañas a los yacimientos tendrían un aproximado de 8.000 y 10.000 dólares por barril de capacidad de refinación.
El representante de la Cámara señaló, durante un foro, que este tipo de plantas solo son viables económicamente en zonas donde se tiene producción petrolera y sobre todo si en la dieta de refinación se utilizan crudos livianos.
A su juicio, Barinas sería una «buena alternativa» para instalar una mini-refinería ya que permitiría atender a Portuguesa, Cojedes y parte de los estados agrícolas en el área de movilidad de alimentos.
Sin embargo, aclaró que estas se deben instalar en «sitios donde se tenga la seguridad y donde se respeten las normas de la industria petrolera, sobre todo en la parte de seguridad, higiene y ambiente».
«La minirefinerías requieren dietas específicas y nosotros estamos intentando en hacer una prueba sobre el crudo Merey 16, pero obviamente es mucho más favorable si trabajamos con crudo Santa Bárbara o Mesa 30 porque mientras más liviano es más fácil», dijo el presidente de la CPV en un foro organizado desde Houston por la Venezuelan American Petroleum Association (VAPA).
Fuente: Banca y Negocios