La posible instalación de la asamblea nacional constituyente no solo tendría un gran impacto político, sino que también afectaría más la economía. La decisión podría provocar una reacción internacional mayor, que incluiría la aplicación de sanciones petroleras especialmente por parte de Estados Unidos, afirmó el economista Alejandro Grisanti.
“Si llegamos al 1° de agosto y se instala la constituyente habría un escenario sumamente negativo en lo económico, liderado principalmente por la posibilidad de un embargo a las exportaciones petroleras”, dijo Grisanti en el Seminario Venezuela: Constituyente, economía y organizaciones, de Ecoanalítica y PGA Group.
Afirmó que en ocasiones anteriores, cuando ha habido un embargo comercial a un país petrolero las exportaciones de esa nación disminuyen casi 50%. “Todo lo que hemos estado viviendo empeoraría”.
Indicó que en caso de que exista una transformación en el país, el escenario económico es más optimista. Aseguró que en Venezuela no hace falta un plan de ajustes, sino una estabilización. “Un país necesita un ajuste cuando sus ciudadanos viven por encima de sus posibilidades. Y aquí nadie puede decir que vivimos por encima de nuestras posibilidades. Cualquier estabilización vendrá de la mano de un plan de emergencia”.
Pocos dólares. El economista Asdrúbal Oliveros afirmó que el gobierno ha continuado con una fuerte contracción en la liquidación de dólares para las empresas privadas, lo que compromete las importaciones y puede traducirse en más desabastecimiento.
Indicó que el mes pasado a través de los mecanismos oficiales se liquidaron 5,6 millones de dólares por día, una caída de 54% en comparación con mayo de 2016 cuando se liquidaron 12,2 millones.
Indicó que la inflación anualizada a mayo fue de 720% y aseguró que con las subastas del Dicom subirán más los precios.