El régimen de Nicolás Maduro habría propuesto una forma de privatizar el petróleo venezolano, ofreciendo, en consecuencia, participaciones mayoritarias y el control de Pdvsa a varias compañías extranjeras, informó Bloomberg.
Fuentes anónimas dijeron que representantes de Maduro han mantenido conversaciones con las corporaciones Rosneft, de Rusia, Repsol S. A., de España, y Eni SpA, de Italia.
«La idea es permitirles hacerse cargo de las propiedades petroleras controladas por el régimen y reestructurar parte de la deuda de Pdvsa a cambio de activos», reseñó Bloomberg.
Obstáculos para privatizar Pdvsa
La propuesta de privatizar a Pdvsa enfrenta varios obstáculos, sobre todo por el complicado escenario político de Venezuela.
Para otorgar el control de la petrolera venezolana a otras compañías tendría que modificarse la legislación del país, lo cual requiere la aprobación de la Asamblea Nacional.
El órgano paralelo del Poder Legislativo, la asamblea nacional constituyente, no es reconocida internacionalmente.
Sanciones
Otra de las dificultades para que se lleve a cabo la entrega de Pdvsa tiene que ver con las sanciones de Estados Unidos, que prohíben cualquier negociación con la petrolera.
Bloomberg indica que para que el Departamento del Tesoro cambie su política sobre Pdvsa, requeriría la aprobación de Juan Guaidó, a quien la Casa Blanca reconoce como presidente interino y como líder del Parlamento.
«Guaidó y la oposición están a favor de aumentar la participación extranjera y la inversión en Venezuela, pero no quieren hacer algo que pudiera ayudar a Maduro a permanecer en el poder. Al contrario, lo están presionando para que renuncie y permita nuevas elecciones presidenciales», señala.
Asalto a la Asamblea Nacional
De allí que el régimen madurista haya concentrado su esfuerzo en asumir el control de la Asamblea Nacional.
«Esta es una de las razones por las que Maduro buscó a Luis Parra: para facilitar la promulgación del cambio de ley requerido, aseguran personas familiarizadas con la situación», agrega.
Luis Parra se proclamó ilegítimamente el 5 de enero como presidente del Poder Legislativo luego de que fuerzas del régimen impidieron el acceso a Juan Guaidó y a la mayoría de los diputados.
Los partidos de oposición denunciaron la puesta en práctica de un plan denominado Operación Alacrán, en el que Maduro ofreció miles de dólares a parlamentarios en un intento para que Guaidó no fuera reelegido.
La comunidad internacional rechazó la junta directiva espuria de Luis Parra y brindó apoyo a Guaidó, que cuenta con el reconocimiento de más de 60 países como presidente interino.
Fuente: El Nacional