El ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela a través de un comunicado rechazó las sanciones impuestas este lunes por la Unión Europea contra siete altos funcionarios del Gobierno nacional.
“Estas acciones indignas, violan los preceptos fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas y pretenden ejercer una grosera injerencia en asuntos internos de nuestro país”, reza el comunicado.
En este sentido, la República Bolivariana de Venezuela exige respeto a su soberanía e instituciones legítimamente constituidas.
A continuación el comunicado integro:
El Gobierno Bolivariano de Venezuela rechaza enérgicamente las medidas restrictivas impuestas contra siete altos funcionarios de nuestro país de manera ilegal y unilateral por la Unión Europea, adoptadas el día de hoy por el Consejo de Asuntos Exteriores en la ciudad de Bruselas. Estas acciones indignas, violan los preceptos fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas y pretenden ejercer una grosera injerencia en asuntos internos de nuestro país.
Hoy la Unión Europea vuelve a ofrecer pruebas irrefutables de su notable subordinación ante el gobierno supremacista y racista de Donald Trump. Estas decisiones denotan una política errática e intervencionista hacia nuestro país, que inevitablemente rememora antiguas y superadas maniobras colonialistas de vetustos imperios, expulsados de Nuestra América hace ya 200 años, por el coraje y voluntad libertaria de nuestros pueblos
Esta conducta obsesiva hacia Venezuela, arrastra a la Unión Europea a infringir sus propios principios fundacionales, convirtiéndose en instrumento al servicio de las pretensiones imperialistas del gobierno estadounidense, trasgrediendo la más elemental normativa del Derecho Internacional y amenazando la estabilidad de nuestro país.
La República Bolivariana de Venezuela exige a la Unión Europea respeto a su soberanía, a sus instituciones legítimamente constituidas y demanda el inmediato cese de las políticas hostiles contra nuestra Patria. Venezuela se reserva las acciones necesarias para defender la dignidad de nuestro pueblo ante las agresiones imperiales, y para proteger nuestras democracia, soberanía y sagrada independencia.