La falta de efectivo en la población continúa y sin visos de una pronta solución porque el Banco Central de Venezuela no envía remesas suficientes a las agencias bancarias públicas y privadas, aseguraron fuentes del sector que solicitaron no mencionar sus nombres.
“El BCV solo entrega 30% de los billetes del nuevo cono monetario que necesitan los bancos”, manifestó uno de los voceros.
Advirtió que agregado al déficit de 70% de las nuevas piezas está que la presencia de las antiguas también es insuficiente y el billete de 100 bolívares sigue predominando. El Ejecutivo ordenó el retiro del billete marrón del mercado en diciembre de 2016; sin embargo, esa medida la ha levantado hasta ahora mediante sucesivos decretos.
“El impacto de la inflación agrava más la situación del dinero efectivo en manos del público porque el incremento de los precios, sobre todo los alimentos, implica una mayor demanda de piezas del nuevo y del viejo cono monetario”, explicó otra de las fuentes consultadas.
El vocero destacó que la información oficial de emitir dos nuevos billetes con una mayor denominación (50.000 y 100.000 bolívares) tampoco se ha concretado.
Reveló que el BCV ya no anuncia con bombos y platillos el arribo de cargamentos de nuevos billetes, lo cual es un indicativo de que no están llegando al país suficientes remesas para satisfacer la demanda. “Se conoció que dos semanas antes del 15 de octubre llegó un volumen de piezas al país, pero eso no fue informado oficialmente por el instituto emisor por lo que se desconoce a cuáles entidades fue entregado ese dinero”, recordó.
Mientras tanto, la situación recurrente que viven los venezolanos es que los bancos les permiten el retiro diario en las taquillas de 10.000 a 20.000 bolívares y de 10.000 a 16.000 bolívares en los cajeros automáticos, los cuales todavía dispensan una parte importante en billetes antiguos de 100 y 50 bolívares, dinero que apenas alcanza, por ejemplo, para comprar 4 o 5 barras de pan.
Un vocero precisó que se mantiene la orden del BCV de pagar completo a los pensionados y jubilados dado que 80% de ellos (3,5 millones de personas) utiliza más el efectivo que el dinero electrónico, además de que acuden a cobrar la pensión durante los primeros 2 días de pago del beneficio.
Según las fuentes consultadas, las 3.400 agencias bancarias y 9.900 cajeros electrónicos del país requieren 23,8 millardos de billetes; sin embargo, solo hay en circulación 14,13 millardos de piezas nuevas y antiguas.
Sobre la negativa de los comercios y camionetas de pasajeros, entre otros, de recibir el pago de los consumidores con piezas de 2, 5, 10 y 20 bolívares, uno de los informantes indicó: “Los consumidores deben denunciar esa situación porque esos billetes, e incluso la moneda de un bolívar, todavía son de curso legal, y los comerciantes y conductores tienen que aceptarlos”.
En este contexto llamó a los consumidores afectados a denunciar esas irregularidades ante la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos y de las Instituciones Bancarias las cuales, a su vez, “deberían estar más pendientes de actuar más en defensa de los usuarios”.
En diciembre el BCV presentó el nuevo cono monetario integrado por 3 monedas de 10, 50 y 100 bolívares además de los billetes de 500, 1.000, 2.000, 5.000, 10.000 y 20.000 bolívares, cuya introducción en el mercado sería progresiva.
Según los expertos, la puesta en circulación del nuevo cono monetario se caracteriza por la improvisación y la opacidad gubernamental, pues a 10 meses de su funcionamiento los venezolanos no pueden acceder al efectivo suficiente. Recordaron que el ingreso y la sustitución del bolívar por el bolívar fuerte se realizaron durante los primeros 6 meses de 2008.
23,8 millardos de billetes requieren las 3.400 agencias bancarias y 9.900 cajeros electrónicos del país, sostienen fuentes del sector.