La inflación intermensual se mantendrá entre 15 y 17% durante los próximos meses, para luego desacelerarse paulatinamente hacia finales del año, de continuar la “evidente” contracción fiscal, apunta la firma Torino Capital.
Los economistas señalan que en los últimos tres meses el índice de inflación mensual ha sido “considerablemente menor” al que se observara en los meses anteriores. La inflación promedio, precisan, cayó de 18,4% en el lapso de agosto-noviembre a 14,6% en el período de diciembre-febrero.
“Creemos que esto se debe en parte al impacto de la crisis en el sistema de pagos generado por la iniciativa gubernamental de sustitución de la moneda, así como a la desaceleración observada en los agregados monetarios clave y el declive en la tasa de cambio en el mercado paralelo”, exponen en su informe semanal.
Justamente, respecto a los agregados monetarios, explican que el crecimiento de la base monetaria se deslizó desde 19,7% en agosto-noviembre hasta 14% en diciembre-febrero (y a un estimado de 5,2% en marzo), en tanto que el crecimiento de la liquidez monetaria bajó desde 13,3% en agosto-noviembre hasta 10,6% en diciembre-febrero (y a un estimado de 7% en marzo).
Torino argumenta, ante este contexto, que su “modelo indicador coincidente” revela una inflación elevada a 455% en febrero, de 423% en enero. La inflación mensual, continúan, ascendió desde 13,4% en enero hasta 15,8% en febrero, no obstante, aclaran que la tasa sigue por debajo de los picos que se exhibieron en el período de agosto-noviembre, cuando promedió 18,4%.
“Claro está, es posible que la aceleración interanual coincida con la desaceleración intermensual, dado que la tasa de inflación mensual era mucho menor hace un año. Para entender eso, nótese que la inflación mensual de 15,8% -el nivel observado en febrero – implica una tasa de inflación anualizada de 484%, en consecuencia, la marca de inflación mensual de 15.8% debería llevar a que los datos anuales confluyan a 484%. Si la inflación interanual está actualmente por debajo de ese nivel, entonces esa convergencia ocurrirá desde abajo, y ello implica aceleración de la tasa interanual”, observan.
Como resultado de una impronta más alta de lo que se preveía en febrero, la firma ajustó hacia arriba su pronóstico de la inflación anual para 2017 de 338% a 361%.
El enfoque de Torino para calcular la inflación se fundamenta en la correlación observada entre dicho índice y otras variables nominales. La fuerte asociación estadística entre las variables nominales en el tiempo les permite anticipar precios con la información que disponen sobre las demás variables nominales.