Las patronales de los industriales de los países del Mercosur y de la Unión Europea (UE) pidieron este jueves urgencia en la entrada en vigor del acuerdo de libre comercio entre ambas regiones, aprobado por los gobiernos el año pasado pero que aún depende de la respectiva ratificación legislativa.
«Las confederaciones empresariales del Mercosur y el BusinessEurope reiteran su pleno apoyo al Acuerdo UE-Mercosur y su compromiso de trabajar junto con autoridades públicas de la UE y de los países del Mercosur para garantizar su rápida ratificación y implementación», asegura una declaración conjunta divulgada por las entidades.
«El acuerdo ofrece muy buenas oportunidades para las economías y sociedades de ambas partes y es de crucial importancia, no sólo por razones estratégicas y económicas, sino también desde una perspectiva de sostenibilidad», agrega el documento divulgado en su portal en Brasil por la Confederación Nacional de la Industria (CNI).
La declaración también la suscriben la Unión Industrial Argentina (UIA), la Unión Industrial Paraguaya (UIP), la Cámara de las Industrias de Uruguay (CIU) y la BusinessEurope.
El acuerdo entre la UE y el Mercosur, anunciado en junio de 2019 al término de dos décadas de negociaciones, depende de su ratificación en los parlamentos para entrar en vigor.
Pero los Gobiernos de algunos países, como Francia y Países Bajos, se han mostrado reticentes a apoyar la ratificación con el argumento de que la apertura del mercado europeo para productos agrícolas del Mercosur puede aumentar la deforestación en la Amazonía.
Estos países han criticado especialmente la gestión ambiental del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, y han exigido que el líder ultraderechista se comprometa con políticas de preservación de la Amazonía y con el cumplimento de los compromisos del Acuerdo de París sobre cambios climáticos.
Para las entidades empresariales, además de los beneficios económicos que puede generar, el acuerdo, especialmente por las oportunidades de negocios que creará, también es crucial para la recuperación económica de los países firmantes tras la crisis global generada por la pandemia de la covid-19.
En el documento las patronales aseguran que el acuerdo es el mayor ya firmado por los países de ambos bloques y permitirá a la Unión Europea encontrar oportunidades en un bloque que se abre por primera vez y a los del Mercosur acceso a un enorme mercado, que está altamente integrado a la economía mundial.
– El 65% del comercio entre ambas partes tiene restricciones –
Citado en el comunicado de la CNI, el presidente de la entidad brasileña, Robson Braga de Andrade, explicó que actualmente el 65 % del comercio entre los dos bloques está sujeto a barreras comerciales y no comerciales, y que la liberación de los aranceles será gradual y favorecerá exportaciones e inversiones de uno y otro lado.
«El acuerdo abre las puertas para una mayor cooperación y la alineación de la Unión Europea y el Mercosur en varias áreas, desde clima y salud hasta el refuerzo del sistema comercial multilateral», dijo el dirigente empresarial.
Andrade recordó que los industriales europeos han perdido en los últimos años participación en el mercado del Mercosur frente a los chinos y que este fenómeno es perjudicial para Brasil debido a que China, ahora el mayor socio comercial del país, está mas interesada en las materias primas brasileñas que en sus productos manufacturados.
«Si consigue aprovecharlo bien, el tratado (con la UE) puede ayudar a Brasil a revertir esta tendencia, ya que favorecerá el comercio entre las industrias del país y las europeas», afirmó.
Las entidades empresariales alegan que, al contrario de lo que dicen parlamentarios de algunos países, el capítulo de Desarrollo Sustentable del acuerdo bilateral es uno de los más avanzados del mundo y prevé que las partes estén de acuerdo en implementar efectivamente el Acuerdo de París.
Afirman igualmente que el acuerdo favorecerá a las medias y pequeñas industrias y derribará trabas burocráticas que dificultan el comercio entre ambas partes.
«El acuerdo abrirá nuevas oportunidades y permitirá reducir barreras y burocracia para darle un mayor acceso a las pequeñas y medianas empresas. Algunos ejemplos de los beneficios conjuntos son la remoción de las tarifas elevadas, acceso al mercado de compras gubernamentales, reglas de facilitación de comercio y protección de las indicaciones geográficas», afirma la declaración.
Fuente: Banca y Negocios