El presidente de Consecomercio, Felipe Capozzolo, aseguró que de generarse una continuidad de las operaciones en lo que queda del 2020, se podría dar un impulso significativo para comenzar el próximo año «con otra perspectiva».
«Realmente empezar enero 2021 con un impulso previo que nos de los dos últimos meses de este año, sería muy determinante y sería definitivamente una herramienta muy poderosa», expresó en entrevista con Unión Radio.
Informó que la incorporación de los 24 sectores de la economía en la última semana de flexibilización «marcó una diferencia», porque se pudo observar más movimiento y empresas y comercios en funcionamiento.
El empresario venezolano estimó que 90% de las empresas del país tienen dificultades para asumir gastos operativos, de nómina, e incluso, para la adquisición de inventarios.
No obstante, destacó que alrededor del 20% de las empresas reconocen la afectación de la pandemia por coronavirus como «catastrófica» ya que se ha visto comprometido negativamente el capital de trabajo, el capital estructural y ha mermado su capacidad productiva hasta tal punto de cerrar sus puertas. Las empresas además – explica – han tenido que buscar otros esquemas de cooperación con sus trabajadores.
Capozzolo considera que ante esos resultados se debe ir a un esquema de continuidad y dejar a un lado la intermitencia de una semana sí y la otra no.
El agremiado destacó que en el marco de la temporada navideña la contratación de nuevo personal «no será distinta» a otros momentos, aunque en términos reales no se podrá comparar con años anteriores.
Al ser consultado sobre la remuneración salarial de los trabajadores en la actualidad, dijo que el promedio a nivel nacional es de 50 dólares, «en algunos casos un poco más en algunos casos tal vez un poco menos».
«Ciertamente estamos hablando de no menos 10 veces más a lo que es el salario mínimo por lo menos del oficial o el que se maneja en el sector público», agregó.
Reconoce que las empresas tienen muchas dificultades con el manejo del efectivo en dólares, sin embargo, insistió que la sociedad venezolana logró romper el yugo de la dificultad transaccional.
Celebró la medida del delivery que ha permitido generar fuente de empleo, de mejorar la calidad de servicios a los usuarios y es novedoso. Va a motivar cambios en materia de políticas públicas y de circulación.
«Tiene muchos efectos colaterales como positivos, pero es la parte pequeño del volumen de negocio para sostener empresas de este sector», apuntó.
«Tenemos un problema social que le impide a la población acceder a bienes y servicios aunque estén en oferta», puntualizó.
– Consecomercio sobre la ley antibloqueo –
El principal vocero de Consecomercio hizo mención de la llamada ley antibloqueo que impulsa el gobierno de Nicolás Maduro para hacer frente a las sanciones impuestas por otros países que dice han causado la crisis del país.
«Esta ley enfrenta dos retos, el primero es ver cómo va a lograr resolver los problemas de los venezolanos, en reducir la pobreza y generar confianza para que venga la inversión, ese es un reto fundamental. El segundo es que tiene que ser una ley transparente, con mecanismos claros, honestos, y si no logra superar esas dos cosas entonces difícilmente servirá para resolver la crisis del país y ocurrirá como la Ley de Precios Justos que agravó el problema económico», destacó.
«Será una ley perdida en el tiempo y será letra muerta en papel», aseveró a La Prensa Lara.
Fuente: Banca y Negocios