El secretario general de la OEA, Luis Almagro, pidió suspender a Venezuela del organismo si no celebra “elecciones generales completas con la mayor brevedad” con observadores internacionales para que sean “libres, justas y transparentes”, señala en su nuevo informe crítico acerca de Venezuela y en el que refiere que el país “viola todos los artículos de la Carta Democrática Interamericana”.
En el texto indica: “La democracia y los derechos humanos son valores que deben estar por encima de la política. La tarea que tenemos es apoyar a Venezuela y restaurar los derechos de su pueblo”.
En el documento, de 75 páginas, Almagro habla sobre el diálogo que se intentó lograr con representantes del gobierno y la oposición sin éxito. “Desde hace más de un año, el mensaje a la ciudadanía venezolana ha sido que era la hora del diálogo. Sin embargo, el diálogo ha fracasado. No podemos permitir que esa premisa siga siendo utilizada como una cortina de humo para perpetuar y legitimar el poder autoritario”.
Considera que “el mecanismo fue decisivamente funcional a la estrategia del gobierno de sostenerse en el poder a partir de reiteradas y continuadas violaciones de la Constitución”. Añade que seguir por ese camino prolongaría la miseria y el aplastamiento de los derechos del pueblo, que no tiene más tiempo.
En el informe especifica una serie de irregularidades cometidas por el gobierno: la no independencia de poderes, la criminalización de las protestas, la corrupción, la crisis humanitaria, la violación de derechos civiles y políticos, así como las trabas para la celebración de comicios.
Condena la inacción de la región y solicita al Consejo Permanente resultados concretos para restaurar la democracia.
Pide no ser cómplices por esperar la acción de otros El secretario general expone sus recomendaciones: exigir que en los próximos 30 días se convoque a elecciones generales con la presencia de observadores internacionales, “la liberación de los presos políticos, la validación de las leyes que han sido anuladas, así como la elección de un nuevo Consejo Nacional Electoral y un nuevo Tribunal Supremo de Justicia, conforme a los procedimientos indicados en la Constitución, el establecimiento inmediato de un canal humanitario y el restablecimiento de los poderes y competencias constitucionales de la Asamblea Nacional”.
“Aprobar la suspensión del desnaturalizado gobierno venezolano es el más claro esfuerzo y gesto que podemos hacer en este momento por la gente del país, por la democracia en el continente, por su futuro y por la justicia”, concluye Almagro en su escrito enviado al Consejo Permanente para su distribución a las delegaciones.
Sustentos. Almagro sustenta su petición en el artículo 20 de la Carta, que estipula que si fracasan las gestiones diplomáticas o ante un caso de urgencia, el Consejo Permanente puede convocar de inmediato una Asamblea General extraordinaria. Además, en el 21, que dice que si la Asamblea, el máximo órgano de la OEA con los cancilleres de los 34 países, constata que se ha producido “la ruptura del orden democrático en un Estado miembro y que las gestiones diplomáticas han sido infructuosas”, puede suspender a ese Estado en la OEA. Se necesitan dos tercios de los 34 países de la OEA y la suspensión entraría en vigor de inmediato.