Banca y Finanzas.- La Junta Directiva ad hoc de Pdvsa introdujo una demanda de nulidad para la emisión de bonos Pdvsa 2020, con un cupón de 8,50%, y sus colaterales ante el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, tal como estaba previsto.
Las partes demandadas son MUFG Union Bank, SA y GLASS Americas, LLC., como fideicomisario y agente colateral de los títulos que comprometen al 50,1% de Citgo como garantía. El comunicado emitido por la directiva de Pdvsa, designada por el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, actuando como mandatario interino de la República, sostiene que el objetivo de la demanda es que los Bonos Pdvsa 2020 sean declarados «inválidos, ilegales y nulos y sin valor ab initio«.
De ser concedida la nulidad, Pdvsa tendría derecho a reclamar la devolución del pago realizado en mayo de este año por 71 millones de dólares, el cual se hizo «bajo protesto».
Otro comunicado, esta vez emitido por el Centro de Comunicación Nacional, en nombre del despacho de Guiadó, como presidente encargado reconocido por el gobierno de Estados Unidos, señala que esta operación fue cuestionada por la Asamblea Nacional antes de la emisión del bono, no solo su racionalidad financiera, sino además el colateral sobre el 50,1% de las acciones de Citgo Holding, Inc. Con esa transacción el régimen de Maduro no solo agravó la situación financiera de PDVSA, sino además, colocó en riesgo el activo más importante de PDVSA en el exterior.
Uno de los primeros objetivos del Gobierno legítimo ha sido proteger los activos de Venezuela en el extranjero, al ser ellos necesarios para atender la emergencia humanitaria compleja. Este objetivo ha sido respaldado por la comunidad internacional y en especial por el Gobierno de Estados Unidos, quien el pasado 24 de septiembre otorgó las medidas de protección que permiten a PDVSA demandar la nulidad del bono 2020 sin riesgo de perder Citgo.
De acuerdo con los lineamientos para la renegociación de la deuda aprobados el pasado 1° de julio, el Gobierno legítimo y la Asamblea Nacional reconocerán todas las reclamaciones legítimas heredadas de los regímenes de Hugo Chávez y Nicolás Maduro. Pero esto proceso exige, con la cautela y rigor del caso, evaluar las reclamaciones basadas en contratos suscritos por los regímenes de Chávez y Maduro en violación a la Constitución. En tales casos, el objetivo siempre será solucionar las diferencias que puedan surgir de manera amistosa.
De no lograrse ese objetivo, el Gobierno adoptará todas las acciones legales para asegurar el respeto de la Constitución, sin cerrar nunca la puerta la solución amistosa de esas reclamaciones.
El discurso del equipo de Guaidó apunta a que las negociaciones con los tenedores del Pdvsa 2020 están cerradas y que solo queda la vía legal, lo que es visto por analistas financieros como un riesgo demasiado alto, porque consideran que los argumentos que sustentan la demanda de nulidad no son lo suficientemente robustos.