El precio de un rubro de la canasta alimentaria superó el salario mínimo en Venezuela, que ronda los dos dólares. Este hecho evidencia la situación crítica de la economía venezolana.
Al inicio de la semana, algunas carnicerías del estado Táchira anunciaron la venta de pollo en 38.000 bolívares, el kilo de queso duro en 30.000 bolívares, al igual que el medio cartón de huevos, según reseñó La Nación.
Para que los consumidores pudieran aprovechar la oferta, debían cancelar en efectivo, de lo contrario, el costo aumentaba. Los comerciantes aceptaban pesos y dólares, monedas de libre circulación, pero de poca accesibilidad.
En cuanto a las verduras, estas tienen un valor entre 5.000 y 10.000 bolívares por kilo.
Con el salario mínimo, una persona puede llenar una despensa de vegetales con escasos tres o cuatro y hasta cinco productos.