Si el gobierno de Donald Trump no renueva las licencias que permitirían mantener las operaciones de las empresas estadounidenses que participan en el sector petrolero nacional, la administración de Nicolás Maduro expropiará los activos y ya estaría negociando con la rusa Rosneft y la china CNPC, entre otras empresas, la venta de estas propiedades.
La agencia especializada Argus Media cita a una fuente gubernamental como origen de una información que se considera altamente confidencial.
La medida afectaría fundamentalmente a Chevron, que tiene participación en varios proyectos de producción en el pais, y a las empresas de servicios Halliburton, Schlumberger, Baker Hughes y Weatherford International, cuya salida representaría un serio problema para Pdvsa, porque las áreas de trabajo de estas corporaciones no tienen demasiados proveedores a escala internacional, porque la perforación y mantenimiento de yacimientos son materias muy especializadas.
Argus Media recuerda que Chevron posee 30% del proyecto de producción de crudo pesado PetroPiar, el cual se está transformando para extraer crudo mezclado; 39.2% de PetroBoscan, que opera el campo de petróleo pesado de Boscan en el estado de Zulia, y una participación de 25.2% en PetroIndependiente, que gestiona el yacimiento de petróleo medio LL-652 en el Lago de Maracaibo. (Modafinil)
Aún en la etapa inicial de desarrollo se encuentra la empresa mixta en la Faja del Orinoco PetroIndependencia, que prevé extraer 400,000 barriles de crudo pesado, y donde la petrolera estadounidense tiene 34%.
Chevron controla 60% del yacimiento de gas natural costa afuera de Loran, que tiene 7,3 billones de pies cúbicos en reservas estimadas.
Sin embargo, todos estos negocios representan apenas 1% de la producción global de Chevron, que sacó apenas 42.000 barriles diarios de crudo de Venezuela en 2018.
Según una nota de Bloomberg, el gobierno estadounidense está discutiendo extender la licencia para que Chevrón siga en Venezuela a partir del próximo 28 de julio
Larry Kudlow, asesor económico de la administración de Donald Trump, reconoció que la materia se está debatiendo, luego de que diversas fuentes indicaran que Chevron venía haciendo un intenso «lobby» para que se renovara su licencia para operar en Venezuela.
La nota de Bloomberg indica que la apuesta de Chevron es permanecer en Venezuela a la espera de mantener su acceso a las enormes reservas petroleras del país, no por los resultados de corto plazo.