El Banco Central de Nicaragua (BCN) informó la emisión de nuevos billetes de 500 y 1.000 córdobas, la moneda nacional, que comenzarán a circular a partir del 8 julio próximo, en medio de la crisis sociopolítica y económica que vive el país desde abril de 2018.
El presidente del BCN, Ovidio Reyes, afirmó en rueda de prensa que la circulación de los nuevos billetes, impresos en sustrato de polímero, fue aprobada por el Consejo Directivo en octubre de 2017 con el fin de fortalecer la calidad y seguridad de los billetes, tomando en cuenta los avances en tecnologías de impresión.
También para abastecer la demanda del público por billetes de alta denominación y reponer aquellos que se retiran de circulación debido a su deterioro, indicó.
Los nuevos billetes tienen los siguientes atributos: alta durabilidad, lo cual implicará ahorros sustanciales en la emisión de billetes; mayor dificultad de falsificación, ya que incorpora medidas de seguridad de última generación; y amabilidad con el medio ambiente, debido a que una vez destruido, el material de desecho de los billetes será reciclable, explicó.
El funcionario precisó que sus dimensiones son de 156 milímetros de longitud y 67 milímetros de altura, con colores y diseños similares a los de circulación actual.
Con esta nueva emisión, el BCN completa toda la familia de billetes en sustrato de polímero iniciada en 2009, con lo cual Nicaragua será de los primeros países en contar con toda sus denominaciones impresas en sustrato de polímero, destacó Reyes.
Los billetes de 500 y 1.000 córdobas (unos 15 y 30 dólares, respectivamente) actualmente en circulación, impresos en sustrato de papel de algodón, conservarán su valor y continuarán circulando junto a los billetes nuevos, hasta ser retirados de manera gradual, conforme a su deterioro, de acuerdo con la información.
El nuevo billete de 500 córdobas es de color rojo y el diseño destaca la Catedral de León en el anverso y el volcán Momotombo en el reverso, igual que el que ya se encuentra en circulación, con la diferencia que está impreso en sustrato de polímero y con mayores medidas de seguridad.
El billete de 1.000 córdobas es de color verde y el diseño destaca la histórica hacienda San Jacinto en el anverso -donde el general José Dolores Estrada a la cabeza de 180 patriotas derrotó a 300 estadounidenses encabezados por William Walker, que pretendían apoderarse de Centroamérica-, y el castillo de la Inmaculada Concepción en Río San Juan en el reverso.
En la economía nicaragüense circulan siete denominaciones de billetes diferentes: de 10 (0,30 dólares), 20 (0,60 dólares), 50 (1,50 dólares), 100 (3 dólares), 200 (6 dólares), 500 (15 dólares) y 1.000 córdobas (30 dólares).
El producto interno bruto (PIB) de Nicaragua se contrajo un 3,8 % el año pasado, según el Banco Central.
El Gobierno calculaba, antes de la crisis sociopolítica que atraviesa desde el 18 de abril del año pasado, que la economía del país crecería en 2018 entre un 4,5 y un 5 %, con una inflación acumulada que se situaría entre un 5,5 y un 6,5 %.
El Gobierno de Daniel Ortega proyecta un decrecimiento de -1,01 % este año, según datos oficiales, mientras que la no gubernamental Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), un centro de pensamiento independiente, prevé otra contracción de entre el -7,3 % y -10,9 %.
Desde abril de 2018 Nicaragua vive una crisis sociopolítica que ha dejado al menos 326 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos locales elevan la cifra a 595 y el Gobierno reconoce 200.