Desde el pasado 13 de mayo el Ejecutivo habilitó las mesas de cambio para operar en los bancos del país con una tasa de compraventa que no ha superado los 6.000 bolívares.
Las mesas de cambio llegaron porque el mercado cambiario está totalmente asfixiado, dijo el economista, Leonardo Buniak.
Las mesas de cambio, según lo establece la resolución 19-05-01 del Banco Central de Venezuela (BCV), tienen por objeto permitir transacciones interbancarias, operaciones de compra y venta de monedas extranjeras por parte de las personas naturales y jurídicas del sector privado.
Buniak consideró “positiva” la medida, porque sería como una ventana que daría “oxígeno” al mercado cambiario. Sin embargo “llega en un momento donde el sistema financiero nacional está en una situación muy complicada con la liquidez, producto de las políticas emanadas por el BCV”.
Sin embargo, la medida no significó el desmontaje del control de cambio, subrayó el especialista en finanzas, José Ignacio Gaurino.
También expresó que la medida probablemente fracase como los anteriores mecanismos implementados por el Gobierno oficialista para tratar la economía venezolana y dijo que lo que puede suceder con el tiempo es que “termine quedando al descubierto la demanda real de divisas y que la oferta no cubra con estas expectativas y por ende el precio del dólar se vaya a niveles que ninguno de nosotros pensamos y tampoco le conviene a la economía”.
La tasa inicial manejada para las operaciones cambiarias fue de Bs 5.633,63 para la compra y Bs 5.689,96 para la venta. El viernes 24 de mayo registró un pico de 5.641,50 bolívares, pero para el lunes 27 de mayo está fijada en 5.738,26 bolívares, publicó Sudeban en su cuenta en Instagram.
Mientras que sobre las mesas de cambio: “Tememos un descalce entre oferta y demanda para las próximas semanas pues este es un sistema solo alimentado por privados y no hay suficiente capacidad para aportar a este nuevo esquema”, dijo el economista Asdrúbal Oliveros en Twitter.
En esta línea, el diputado José Guerra, señaló que “los montos que se han negociado en este sistema son prácticamente insignificantes, de hecho en mayor medida las transacciones se siguen haciendo en el mercado paralelo”.
“El mercado paralelo continúa aumentando en la medida de que no se consigan las divisas oficiales. Hay escasez de divisas porque el 93% de las divisas que el país genera proviene de la actividad petrolera pero estamos inmersos en una caída vertiginosa en la producción de petróleo”, apuntó Buniak.
¿Confianza? Al momento de redactar esta nota, el precio dólar no oficial era de 6.710,11 bolívares por divisa americana, reportó @DolarTrue_ lo que significa que esta tasa se incrementa cada día más con respecto a la de las mesas de cambio, ya que según expertos en la materia este sistema aún no genera confianza en la población venezolana.
Por su parte, el economista Jesús Faría, asegura que las mesas de cambio estabilizarán la economía de Venezuela y con esta medida se podrá frenar la hiperinflación.
“Vamos a un proceso de flexibilización, del régimen cambiario, se derogó el control de cambio, ahora intervienen los bancos y cada vez intervendrán más cantidad de actores, lo que se quiere es que el mercado se active oferta y demanda definido el precio y que no sean unos especuladores desde una página web quienes impongan el precio que les da la gana y eso genera un sufrimiento concreto”, expresó.