Estados Unidos espera que las sanciones que aplicará a Irán a partir del 4 de noviembre próximo, generen el impacto negativo que se viene vaticinando en el mercado, en cuanto a una reducción significativa de la oferta de crudo, y con ello un impulso significativo en los precios del crudo.
Así lo dejó entrever Brian Hook, enviado especial de ese país para Irán, quien restó importancia al efecto de que la provisión iraní sea impulsada a la desaparición.
Según afirmó este lunes el funcionario, “no hay razones para creer que el mercado deje de ser equilibrado y de estar bien abastecido”, indicó.
Insistió, de acuerdo a un reporte de Reuters, en que Irán financia grupos terroristas con recursos provenientes del negocio petrolero. “Estamos trabajando con países que están reduciendo sus importaciones (de crudo iraní) para garantizar que esto suceda”, sostuvo, al tiempo que certificó que Washington confía en la estabilidad de los mercados de energía.
“Debemos centrarnos en estos fundamentos y no distraernos con las afirmaciones emocionales y desequilibradas que vienen de Teherán “.
También ayer Irán, el tercer mayor productor de la OPEP, dijo que sus exportaciones de petróleo no pueden detenerse debido a la alta demanda, afirmó el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Bahram Qasemi, que “no es práctico”.
Irán bombeó 3,45 millones (dpd) en septiembre, según la OPEP, una baja de 150,000 bpd desde agosto.
Según los observadores del mercado, otra amenaza se cierne sobre EEUU mientras favorece a los productores, y es que el fin de semana Trump amenazó a Arabia Saudí de imponer severas sanciones a ese país por el presunto asesinato del periodista Jamal Khashoggi, crítico del príncipe saudí en sus columnas del Washington Post de quien se afirma, nunca abandonó la sede diplomática de su país en Estambul, desde que entró el 2 de octubre.
Varios analistas del área sostuvieron que tal medida podría impulsar el precio del barril a entre 100 y 200 dólares, un valor inédito este último, porque el productor respondería restringiendo el envío de crudo a EEUU y aplicando otras estrategias.