El primer día de vigencia del nuevo precio de la gasolina comenzó con un suministro irregular, ya que un número importante de estaciones no tenía disponible el carburante y otras no pudieron abrir por no haber completado los procesos de ajuste y calibración de las máquinas surtidoras.
Gerentes de estaciones consultados por Banca y Negocios indicaron que hubo «improvisación» en la aplicación del nuevo esquema de precios, por lo que este 1 de junio no puede haber un suministro «normalizado».
Hay que recordar que la gasolina que se está poniendo a la venta es un producto iraní, cuyo octanaje no está claro, y que comenzó a ser distribuida este domingo 31 de mayo, por lo que no se ha alcanzado una cobertura nacional.
Esta situación afecta a los conductores cuyas placas terminan en los números 1 y 2, quienes no podrán surtir hasta la próxima semana, de acuerdo con el sistema de «pico y placa» que diseñó el gobierno para gestionar la oferta limitada de gasolina.
Igualmente, los transportistas están en el «limbo», básicamente porque no hay claridad sobre si se les aplicará algún tipo de racionamiento, ya que los autobusetes requieren no menos de 80 litros de carburante por día para prestar servicios. Igualmente, hay preocupación por los precios, aún cuando, durante 90 días, tendrán los costos de combustible subsidiados al 100%.
En Caracas se observan colas en todas las estaciones que teóricamente deben estar abiertas, pero el proceso para surtir será complicado.
– Mercado Premiun: más preguntas que certidumbres –
Pdvsa dio a conocer la lista de 200 estaciones de servicio que venderán gasolina «super premiun» importada por actores privados al precio de US$0,50, pero los primeros reportes es que este combustible no está disponible en la mayoría de las gasolineras habilitadas.
El gobierno no proporcionó ninguna información sobre quiénes son los importadores de combustibles autorizados y cómo se está manejando la distribución a partir de los llenaderos de Pdvsa, donde se va a dar prioridad al combustible iraní que se venderá a precio subsidiado.
Se estima que este segmento abarcará alrededor de 10% de la demanda, en línea con las estimaciones del porcentaje de la población que tiene acceso a dólares de forma sostenible.
Fuente: Banca y Negocios